7 contundentes verdades en la vida de un diseñador según Cristoph Niemann
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Cristoph Niemann, conocido ilustrador y diseñador gráfico alemán, habla de 7 implacables realidades a las que se enfrenta quien trabaja en el mundo del diseño y la comunicación visual:
La calidad del trabajo no es siempre lo importante.
Debería serlo en diseño, pero muchas veces se trata de llegar a la persona que toma las decisiones en el cliente. También debes de ser realista y honesto contigo mismo sobre cuánto de bueno es tu trabajo. Es importante examinarte de vez en cuando y preguntarte: ¿sentiría envidia si alguien hubiera hecho esto?
No hagas promesas que no puedas cumplir. No intentes venderte constantemente y por encima de todo.
Cuando por encima de todo intentas venderte, siempre exageras. Hay que ser consciente de que la relación con un cliente o un posible cliente es una calle de doble sentido.
No siempre se puede predecir qué les gustará y qué no, pero sí puedes conseguir que confíen en ti, demostrarles que al final el trabajo valdrá la pena. Es como subirle contigo al autobús y decirle “Quiero seguir una ruta agradable. Podría ser diferente de la habitual, pero aun así llegaremos a tiempo”.
”Si están dispuestos a hacer ese viaje deberías estar muy agradecido, lo más importante con el cliente es la confianza".Cuida tu portafolio, piénsate bien lo que muestras.
Enseñar sólo los mejores trabajos te pone en un compromiso. Muestra lo que estás seguro que podrás repetir de la misma manera, infinitas veces.
Ten todo bajo control, no solo el trabajo creativo.
Es genial ser un genio de la creatividad, pero si como mínimo no eres medio responsable, antes o después vas a fastidiarla. Si eres freelance o tienes un estudio no sólo tienes que dedicarte a crear, eres el jefe y tienes que tener otras cosas bajo control. Si no puedes hacerlo solo, contrata a alguien que te lo lleve. Ser un mal empresario puede arruinar tu carrera de diseñador.
Nunca dejes de avanzar, nunca.
Ya sabes hacer lo que haces. Puedes manejar Photoshop con los ojos cerrados y te crees un maestro, pero no es así. Esta no es una cualidad con la que hayas nacido, esto es una curva de aprendizaje permanente. Nunca te des por satisfecho, pídete siempre más.
Cuida de ti mismo al igual que de tu trabajo.
Hay gente que piensa que cuidarse a uno mismo y permitirse cierto ocio o descanso es sinónimo de debilidad, pero es completamente incorrecto. Para el trabajo creativo es imprescindible alimentar nuestro interior para poder comunicar y aportar valor hacia el exterior. Permitirse tener ocio y descanso (museos, películas, viajes, deporte, etc.) es imprescindible para mantener y desarrollar tu carrera en el diseño.
Sé positivo.
La buena idea que has tenido, realmente es una buena idea. Pero en comunicación visual, la pregunta clave es: ¿lo entenderá la gente?
Aviso para principiantes:
“el proceso creativo puede ser dolorosamente difícil”
Con Twitter e Instagram la forma de consumir cultura visual ha cambiado mucho y gracias a ello, muchos clientes entienden que los consumidores son más visuales y que conectan con esta cultura más y mejor que antes, por lo que están dispuestos a arriesgarse más con el trabajo.
Pero ¿qué es realmente una buena comunicación visual? Una de las cosas que consigue implicar al público es lo inesperado. No tiene por qué ser humor, puede ser trágico o abstracto o real. pero inesperado.
Dice Niemann, “la única regla que tengo para la comunicación visual es que si puedes describirla con palabras, si puedes comunicarlo en dos líneas de un correo electrónico, entonces no es suficiente, piénsalo de nuevo”.
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